El Smog

El fenómeno conocido como “smog” se empezó a notar tras la aparición de la Revuelta Industrial en algunas de las urbes más industrializadas. Es una neblina rojiza y oxidante.

Era una mezcla de otros gases y átomos (predominando los sulfatos, SOx) originarios de combustiones que en el aire ayudaban a que se condensara la humedad presente en él, formando, así, niebla.

Los orígenes del smog fotoquímico son los óxidos de nitrógeno y los VOC, que resultan del tráfico y las industrias.

De hecho, provoca un envejecimiento prematuro del sistema respiratorio, a través de un proceso constante e irreversible que no produce dolor al organismo y que lo va aniquilando silenciosamente.

El silencioso y persistente daño de las micropartículas en el cuerpo humano es un informe que debe ser tomado en cuenta con compromiso.

De hecho, se ha justificado que en periodos de smog muy prolongados en ciudades con una gran capital aumenta de forma formidable la tasa de destrucción. Además se opina que a largo plazo podría tener efectos cancerígenos y mutágenos, pero no existe seguridad en estos testimonios.

Para impedir este fenómeno es viable tomar algunas medidas como el impulso del transporte público, el uso de combustibles limpios o la depuración de los vapores de los vehículos. Con todo esto podremos ayudar al planeta tener un ambiente muy distinto y deferente para nosotros y es mejor tener un ambiente sano que contaminado solo depende de nosotros en cuidar el planeta.

 El planeta es como nuestra madre “Cuídala”