Como cuidar el planeta  
En el hogar:
Utilizar
 racionalmente el agua, reduciendo su consumo en las actividades 
domésticas y manteniendo en buen estado los grifos y las tuberías.
Usa el transporte público. Los viajes en coche suponen 
la mitad de las emisiones totales de CO2 procedentes del sector del 
transporte y la mayor parte se genera en los viajes de casa al trabajo o
 a la escuela, y viceversa. Usa el transporte público en la mayoría de 
los trayectos urbanos, como llevar a los niños al cole (les puedes 
llevar andando) y para los trayectos al trabajo puedes utilizar el 
trasporte público o el coche compartido, o puedes optar por comprarte un coche eléctrico o usar la bicicleta.
Apaga la luz. Las habitaciones que no se utilizan 
deberían permanecer a oscuras. Y se deben sustituir las bombillas de 
toda la casa por unas de bajo consumo. Esto permite ahorrarnos dinero y 
reducir nuestra huella de carbono. Las bombillas de bajo consumo es 
cierto que son más caras pero duran unas diez veces más, lo que supone 
un ahorro.
El algodón engaña. Las prendas de algodón pueden 
considerarse una buena opción. Sin embargo, la producción industrial de 
algodón tiene graves consecuencia medio ambientales derivadas de la 
necesidad de grandes cantidades de agua para su producción y el uso de 
pesticidas.
Hasta la década de los 60 el mar de Aral era el cuarto lago más 
extenso del mundo. Los soviéticos desviaron los principales ríos que 
abastecían el lago para utilizarlos para riego de enormes extensiones 
algodoneras. Debido a este uso indiscriminado del agua, el lago se fue 
encogiendo y en 1990 quedaba apenas del 25% de la superficie original, 
provocando la muerte de los peces y plantas autóctonas de la zona, y el 
sustento de muchas familias.
En la escuela: 
- 
Desarrollar
 actividades para el mantenimiento del área educativa: jornadas de 
limpieza, pintura de las paredes, reparación de ventanas y pupitres y 
todo lo que implique mantener la escuela en buen estado.
 
- 
Concientizar
 a los niños y jóvenes en cuanto al uso racional de los recursos: 
enseñarlos a aprovechar el papel, los lápices, las pinturas, materiales 
de desecho y otros.
 
- 
Involucrar
 a la comunidad educativa en las actividades ambientales promovidas en 
la escuela (mantenimiento de la escuela y áreas deportivas, recolección 
de papel y vidrio para procesos de reciclaje, organización de 
carteleras, paseos y sensibilización hacia la naturaleza).